Descarga la versión impresa Boletín NCCP 16 de julio
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Los traidores a la patria y quienes constantemente impusieron presidentes a través de fraudes, están en una intensa campaña para hacer a un lado la fuerza popular que permitió el triunfo electoral de Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Opacan la gran movilización que impidió el fraude, para decir que fue un triunfo de la democracia mexicana, como si esta existiese de verdad. Ocultan el descontento y rechazo en su contra con la propuesta de reconciliación. Los proyectos en contra de las comunidades se sostienen. La entrega del país también, siempre y cuando no viole las leyes establecidas. La Ley de Seguridad Interior y la visión de seguridad nacional subordinada a Estados Unidos sigue. Los empresarios y políticos tradicionales que prometió incluir AMLO en su gabinete, y que son coresponsables del desastre del país, aparecen como los principales actores de la transición.
En un suceso nunca antes visto, llegó una delegación de primer nivel de Estados Unidos a reunirse con AMLO en México, y de paso visitaron al actual presidente. El equipo que vino evidencia que la relación México-Estados Unidos se sostiene igual: además de Mike Pompeo, secretario de Estado, vino la representante del Departamento de Seguridad Nacional, Kristjen Nielsen, porque México seguirá siendo un asunto de Seguridad Interior, el secretario del Tesoro Steven Mnuchin, por el botín que representa México para ese país, y Jared Kushner, yerno de Trump y su principal asesor, porque el racismo, el terrorismo de Estado y el intervencionismo no pueden faltar nunca. Los temas fueron: la renegociación del Tratado de Libre Comercio, las políticas de desarrollo para México durante el próximo sexenio, el cuidado de la migración en la región y las políticas de seguridad.
¿Es un cambio de época? ¿El triunfo de AMLO se debe aun giro en el que el capitalismo ha entrado en una fase más sensata de fortalecimiento de las economías nacionales? ¿Estamos en un momento nuevo en que el sistema nos permitirá luchar desde mejores condiciones?
Ya un negro demostró que los rostros aparentemente incómodos pueden darle oxigeno a la dominación, incluso para hacerla más cruel, siempre y cuando tenga una careta “más humana”… La palabra proscrita del vocabulario oficial, que el “cambio histórico” omite pronunciar, es el imperialismo. Estos tiempos quizás sean los de una reforma del capitalismo en Estados Unidos y las grandes potencias, pero mientras el imperialismo exista y siga determinando la política de México en lo fundamental, no habrán mejores condiciones de lucha para nosotros ,ni épocas nuevas.
La refundación nacional sigue siendo una tarea pendiente, que sólo el pueblo podrá realizar. Para ser verdadera, tendrá que enfrentarse a aquellos que hoy se ponen al frente de la transición para que no cambie nada, y sobre todo, tendrá que enfrentar al imperialismo.
La constituyente propone…
La inconformidad social se sostiene, la esperanza de cambio también. Las tensiones entre el descontento y la esperanza se mantendrán por largo rato. La necesidad de un cambio profundo, podrá ceder en lo inmediato ante los cambios moderados más llamativos. Pero en lo esencial, seguirá como una fuerza que reclama para el pueblo ir más allá de lo conseguido.
La gran transformación que necesita el pueblo de México no podrá alzarse sobre el edificio de desastre, injusticia, desigualdad y traición nacional construido por la oligarquía a lo largo de los años. Tendrá que ser derruido y la nación que necesita el pueblo tendrá que alzarse bajo otros cimientos, los del pueblo.
El imperialismo siempre será imperialismo y nosotros tenemos que luchar contra él. La necesaria liberación está pendiente y no vendrá de arriba, vendrá de nosotros y nosotras, de quienes día a día sostenemos este país.