Jornada de Actividades en conmemoración al centenario de Monseñor Óscar Arnulfo Romero, Mártir y Santo Latinoamericano 

#Romero100-W

OSCAR ROMERO*

Oscar,
herido por el tiempo recogiste el pan eucarístico,
el verbo hecho sangre, carne desnuda y lacerada,
el Cristo Crucificado con el Pueblo.
Las campanas de Rutilio resonando en tu cabeza,
Palpitar de cinco siglos agolpados.

«Quizás los asesinos estén escuchando mis palabras»

-dijiste-
«Quiero decirles que los queremos, hermanos asesinos
y rezamos para que se arrepientan de corazón»

Tu voz, aliento de luz, profunda y nutricia
nos entrega el nuevo credo, santo y verdadero,
construir el nuevo cielo, pretendido y esperado,
el reino de Dios en la tierra,
la liberación y redención de nuestro pueblo,
la dignidad humana, la unión fraterna, la libertad.

Entregado al dolor, inmolado,
eres el grano que produce la cosecha,
nos alimenta para dar nuestra sangre y nuestro cuerpo
al sufrimiento y la esperanza,
Para que el amanecer se convierta en la soñada realidad.

Limpio, iluminado, trasfigurado,
tu muerte redentora nos llena de vida
en el amor del Dios hecho hombre
y del hombre alcanzado por la santidad de Dios.
Eres en todos el sacrificio del Cristo colectivo,
eternamente resucitado.

Oscar, ruega por nosotros.
La tiniebla defiende a toda costa
el tobillo de barro de la estatua que soñó Nabucodonosor.
Oscar, danos siempre la esperanza
todavía
nos habita
la sombra.

*Poema de Monseñor Pedro Casaldáliga sacerdote y  poeta brasileño.

 

 

Related posts

Leave a Comment